DEVORAR EL HORIZONTE
Cuando veo la línea del mar
que se come mi horizonte
pienso en Ti
y te digo:
no sigas por favor
construyendo ese Cielo
que no se acaba nunca
precioso, único, cada día
como si fuera el último
pero siempre nuevo, inagotable
sin acabarse,
sin llegar nunca a abarcar
su belleza en mi espejo
como si me entendieras
y yo no pudiera sino reflejarte
Y veo llegar las olas rotas,
verdes, sudorosas
preñadas de ocasos
vomitando náufragos
Pero al poco, levanto la vista
al fondo de Ti
allí donde se junta
mi reflejo con el Tuyo
Y mientras la playa
se desguaza en restos
sigo devorando el horizonte
donde la marea no se acaba
Y siento
como se despeña el Cielo
sobre mí todos
los días, todos
para decirme sin parar
te quiero, te quiero, te quiero